Descripción
Un espectador pone un dado dentro de un pequeño tubo fuera de la vista del ilusionista, memoriza la cifra que indica el dado en el fondo del tubo y cierra la tapa. El ilusionista pone el pequeño tubo dentro de otro más grande para aislar completamente el dado y evitar así cualquier trampa.
A pesar de todas estas precauciones el mago es capaz sin vacilación alguna de decir la cifra del dado que acaba de fijar en su memoria el espectador.